La cortina de humo

No leer si no se ha visto y se está interesado en verla: puede contener algunos spoilers.

He aquí una película bastante inteligente, con mala baba y entretenida. Dirigida por Barry Levinson, el guión es de David Mamet y Hilary Henkin, basado den el libro American hero, de Larry Beinhart.

La idea es sencilla: el presidente X, a once días de la reelección, es acusado por una joven de acoso sexual.

Llaman a un hombre de Washington, Conrad Brenan (Robert de Niro), que empieza una hábil maniobra de distracción para que el pueblo se crea lo que a la Casa Blanca le conviene. Para hacer más creíble la maniobra, contacta con el mayor productor de Hollywood, Stanley Motss (Dustin Hoffmann) para que maneje todos los hilos mediáticos. Entre ambos, harán que el pueblo se crea que Estados Unidos está en guerra con Albania (es ideal, nadie sabe ni siquiera dónde está).

Sobre esta idea -que tiene un punto de partida asaz escalofriante- se levanta un película entretenida con unos actores fuera de toda duda: Anne Heche hace muy bien de esa asesora que mete la pata -sin caer nunca en el patetismo ni la falta de respeto-, Robert de Niro, en uno de los mejores trabajos que le he visto -creo que sólo sobreactúa en una escena, y creedme, venía a cuento-, Dustin Hoffman, con un papel de hollywoodense exhibicionista que busca el prestigio derivado de su trabajo, Woody Harrelson, el singular héroe hallado, y William H.Macy, un secundario de lujo.

La narración es muy ágil, llena de vueltas de tuerca, que hacen que no resulte en absoluto aburrida. Lo dicho, los planes de la Casa Blanca dan un poco de miedo...